viernes, 12 de septiembre de 2008

Entre Chichen Itzá y estaciones espaciales


Como todos los días, estaba viendo Primero Noticias en la mañana, cuando me encontré que Loret de Mola estaba entrevistando al austronauta de origen mexicano que va a participar en una misión para la NASA. El astronauta incluso llevó muestras de comida espacial y respondió algunas preguntas curiosas sobre el tema, comentando que definitivamente iban a llevar tortillas al espacio cómo no.

El caso es que este astronauta está en México por razones más ambiciosas que mostrar lo orgulloso que está de serlo. José Hernández (el susodicho) y varios senadores mexicanos propusieron hoy la creación de una Agencia Espacial Mexicana que, de concretarse, podría tener una plataforma para enviar cohetes al espacio en la Península de Yucatán, en el sudeste del país.

Esta estación "podría ser un centro con plataforma de lanzamiento y de aterrizaje, ya que al encontrarse más cerca del ecuador las naves gastarían menos en combustible y eso es un buen punto para poder atraer a esas industrias espaciales", afirmó Hernández. Quiere
impulsar un proyecto legislativo que en abril de 2006 ya proponía la creación de una agencia espacial en el país y que en las próximas semanas será discutido nuevamente en el Congreso mexicano.

Esto sí que me sorprendió, pues nunca pensé que esas cosas en México pudieran llegar a tomarse en serio. Incluso de aprobarse el proyecto, se invertirían 6 millones de dólares (lo cual me parece poco, pero no se cuál sea su plan).
Aunque reconoció que en México hay a lo mejor otras necesidades más imperiosas, reiteró que el momento es propicio para entrar a formar parte de la comunidad espacial mundial.

Pues quién sabe si esto tendrá algun sentido práctico para el desarrollo del país, según esto ayudaría sobre todo a desarrollar la ciencia local y evitaría la fuga de cerebros. Tal vez termine siendo algo así como el Corredor Aeronáutico que tenemos en Querétaro, donde se hace una gran faramalla de que la industria aeronáutica civilizó a la ciudad, cuando sólo se hacen cables que van en la pieza de la pieza del avión jaja. Tal vez en este centro espacial se empaque la comida deshidratada de los astronautas, pero al final a todos los mexicanos nos hará sentir bien porque nos sentiremos parte de la comunidad aeroespacial!. Nos sentiremos muy patriotas y orgullosos de conquistar el espacio y ver a nuestro astronauta nacido de una humilde familia de Michoacán saliendo a la misión misión STS-128, con una bandera mexicana y una imagen de la Virgen de Guadalupe, el próximo 30 julio de 2009.


3 comentarios:

Gerardo Ruiz dijo...

Por el astronauta que chido, al menos nos queda claro que no hay racismo en el espacio jajaja... digo por que para ir al espacio tienes que ser el mejor del mejor del.... mejor

En cuanto a la industria aeroespacial aqui en queretaro es chistoso... hace poco fui a una interview a una conocida compañia española en donde se daban su tacote diciendo que hacian partes para aviones militares y yo pregunte...que partes? a pues unos componentes electricos que van en el mando del motor.... que componentes?... arneses, AHH mira que yo tengo apmplia experiencia en eso jajajajaja
Y el diseño, es español? mmmm no, es gringo... a entonces es como maquiladora?... no! entonces? aqui armamos partes para aviones y helicopteros rusos.....
Ta bien, pero pa mi se llama maquila.

Leunam dijo...

Sí qué bueno que no hay racismo, porque la verdad, no es por ser mala onda pero el señor astronauta mexicano es un perfecto ejemplo del estereotipo del "Latin" - Morenito y con bigotito y seguramente muchas ganas de servir a usté y a Dios.

Emilio dijo...

buen blog!